jueves, septiembre 19

Las economías regionales están “en jaque” por los costos crecientes y precios “bajos y volátiles”

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El informe de julio del “Semáforo de Economías Regionales” de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (CONINAGRO) reflejó un deterioro en la mayoría de las producciones agroindustriales en Argentina. Según este índice, que clasifica 19 segmentos productivos en verde, amarillo y rojo, 12 actividades se encuentran en rojo, 4 en amarillo, y solo 3 en verde.

El semáforo de CONINAGRO ofrece un diagnóstico simplificado del estado de las economías regionales. En este caso, el informe muestra una «marea roja», con 12 actividades en estado crítico debido a la baja demanda, costos elevados y precios estancados. Entre las actividades más afectadas se encuentran la producción de bovinos, peras y manzanas, ovinos, papas, miel, vino y mosto, yerba mate, leche, cítricos dulces, y granos.

Solo tres sectores lograron mantenerse en verde, mostrando señales favorables gracias a precios atractivos para los productores. El arroz, por ejemplo, continúa mostrando un comportamiento positivo, manteniéndose en verde por quinto mes consecutivo debido a mejoras en precios, superficie cultivada, producción y exportaciones. Sin embargo, el incremento en los costos energéticos plantea un desafío significativo para mantener estos resultados favorables.

Las actividades en amarillo, como las aves, el maní y el algodón, siguen enfrentando fluctuaciones que dificultan la planificación y afectan los ingresos de los productores. El algodón, en particular, refleja una recuperación en la producción, pero con precios que aún no logran repuntar, lo que genera preocupación entre los productores.

El sector de cítricos dulces permanece en rojo por cuarto mes consecutivo, con precios que no logran cubrir la inflación y un incremento en los costos de almacenaje y logística, sumado al impacto negativo de las recientes heladas. El sector de la producción forestal también sigue en rojo, afectado por una baja demanda en el mercado de la construcción y en las exportaciones, lo que ha mantenido a la industria en una tendencia negativa durante varios meses.