sábado, mayo 4

MEDITACIÓN DEL EVANGELIO

0
192

Mateo 16,13-19:

En aquel tiempo, al llegar a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?»
Ellos contestaron: «Unos que Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno de los profetas.»
Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?»
Simón Pedro tomó la palabra y dijo: «Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo.»
Jesús le respondió: «¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo.»

Palabra del Señor
MEDITACIÓN DEL EVANGELIO 💫

Mateo 16, 13-19:

💫La identidad de Jesús.

La identidad de Jesús es lo que siempre te debe quedar en claro en tu vida, es saber quién es Él y cómo lo tomas en tu vida.
 Es muy fácil dejarse llevar por lo que dice la gente y es muy fácil comprarte un Dios que te vende la gente. Creo que hoy en la góndola está la promo 3X1. Te venden tres tipos de Jesús para que lo vivas en tu vida:

1) Jesús madrastra:

Es el Dios castigador, el que solo hace justicia y marca tarjeta. Marca los puntos. Se convierte casi en árbitro de fútbol, porque marca las jugadas, y si te pasa algo es porque te sacó la tarjeta.

2) Jesús lámpara:

Es un estilo de Aladino, que en vez de frotar mucho, debo rezar mucho para que me dé lo que le pido. Rezo y rezo hasta que me lo dé.

3) Jesús secretario:

Es aquel que me acomoda todo desde mi idea. Acata mis órdenes. Yo le digo lo que quiero y le pido que me lo prepare para que salga todo como yo quiero. Es decir que yo soy el piloto de mi vida y Dios es mi copiloto.
Por último, en Pedro vemos la respuesta del Dios que nos propone el cristianismo: un Dios cercano, un Dios vivo y que libera. Tener a Dios de esta manera te cambia la vida. Hasta el cielo no paramos.