Por: Nicolás Munafó 26 de abril de 2020
No fue un domingo más de cuarentena para gobernadores e intendentes de los grandes centros urbanos. Las palabras de Alberto Fernández en la noche del sábado permitiendo la salida por una hora en un radio de 500 metros a la redonda sorprendió a varios.
“Hemos escuchado mucho el reclamo de todos y todas, y la necesidad de poder salir un rato de las casas», dijo el Presidente y siguió anunciando que “diariamente cualquier persona podrá salir en un radio de hasta 500 metros de su casa con fines de esparcimiento, salir a caminar, airearse un poco” y puso el foco en las responsabilidad de las personas afirmando “confío en cada uno de ustedes». Luego de las 21:30 del sábado, los teléfonos empezaron a sonar para ver los pasos a seguir en cada distrito porque entendían que no estaban dadas las condiciones para llevar adelante este cambio importante en plena cuarentena. Pasadas las 22, el Jefe de Gobierno porteño reunió a su tropa por teleconferencia para analizar el asunto: “Estábamos sorprendidos”, le confiaron fuentes de la Ciudad a minutouno.com. 00:00/00:00Loading Ad
No quedó en el distrito porteño la cuestión porque Axel Kicillof levantó el teléfono e intercambió opiniones con Larreta mostrándose una vez más cerca, a pesar de pertenecer a distintos partidos. “¡Lo que permite la pandemia!”, resaltaron desde la administración capitalina. En la charla, Larreta y Kicillof coincidieron en que había muchas más ciudades de más de 500 mil personas en las que sería peligroso permitir salir a sus ciudadanos libremente, y sumaron a la charla al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti; y a su par de Santa Fe, Omar Perotti, para pensar juntos qué hacer.
Los cuatro coincidieron en que en la actualidad el riesgo de contagio es grande y además sería muy difícil de controlar a quienes salen, el tiempo que salen de sus casas y si están o no dentro de los 500 metros permitidos. “Es riesgoso implementarlo en este momento, además es difícil de hacerlo cumplir”, aseguraron desde el gobierno bonaerense a este portal. Este domingo las charlas se intensificaron.
En la Ciudad se juntaron a las 10 en la sede de Parque Patricios y no veían la forma de implementarlo sin correr riesgo de posibles contagios. Además, vieron lo que sucedió en España y temían que se replicara en Argentina: “eso es lo que no queremos que pase acá” afirmaron quienes estaba reunidos con Larreta y agregaron “estamos en el foco de la pandemia, debemos ser más restrictivos”.
También por la mañana desde el gobierno nacional afirmaban que “cada distrito definirá si lo pueden hacer o no”. Los llamados no se detenían y los intendentes también eran consultados y la mayoría coincidía en ser cautos. Por su parte, ya de acuerdo con la medida, tanto Kicillof como Larreta hablaron con Alberto Fernández para explicarle la situación y lo que habían conversado con los gobernadores de Santa Fe y Córdoba.
El Presidente, según confiaron a minutouno.com, fue claro con los mandatarios: “Ustedes definan lo que necesitan hacer” y les dio el visto bueno. “Fue todo consensuado. No hay polémica alguna porque se charló entre todos”, aseguraron. Ya a las 15 la idea estaba cerrada y comenzaron a redactar el comunicado entre las cuatro provincias.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, aseguró en una nota con Radio 10 que “pusimos cuál es el techo de las posibilidades de las salidas de esparcimiento. Cada jurisdicción determina la oportunidad de esta medida. No es lo mismo el Gran Buenos Aires que Chubut”.
Con el correr de las horas se fueron sumando a las restricciones provincias como Tucumán y Misiones. Otros distritos esperaran a reunirse este lunes con los equipos de trabajo y definir qué hacer.
En la provincia de Buenos Aires, más allá de la negativa en las grandes urbes, le ven posible en las ciudades del interior “las ciudades de baja densidad poblacional y baja o nula circulación de virus pueden permitir las salidas con el criterio que determine el municipio”, confirmaron. El apoyo al Presidente en la extensión de la cuarentena está asegurado aunque hoy los gobernadores con más personas infectadas temen dar un paso en falso.