Entre los principales sponsors que buscarán generar un retorno en dólares figuran YPF y Santiago del Estero, la provincia que comanda Gerardo Zamora.

Recientemente se dieron a conocer dos grandes noticias para el mundo del deporte. La llegada de Agustín Canapino al automovilismo estadounidense y la firma de Franco Colapinto, la promesa para la Fórmula 1, con la academia Williams, traen consigo buenos augurios para la Argentina. No obstante, detrás de su escalonado ascenso, se esconde una trama de “retornos” en dólares que terminarán en bolsillos de puntuales funcionarios K.

El nexo de esta movida millonaria sería el contador Héctor Martínez Sosa, presunto testaferro de Alberto Fernández. El hombre en cuestión es accionista de las empresas Flyers Concierge Latam SA y Safety Consultora de Higiene y Seguridad SA. Supo hacer fortuna a través de una humilde productora de seguros cuando Alberto era vicepresidente del Grupo Bapro.

Actualmente, reside en San Fernando, donde posee dos ostentosas viviendas. Una de ellas se encuentra ubicada en el cruce con la esquina de Guido Spano, donde se anexaron dos lotes vecinos de 600 M2 cada uno en los últimos 5 años.

Martínez de Sosa es uno de los principales promotores del negociado. Entre los principales sponsors de ambos pilotos figuran YPF y Santiago del Estero, provincia comandada por Gerardo Zamora.

Cómo se desarrolla el entramado

Al respecto de esta maniobra, una fuente que participó de las tratativas y quedó afuera del negociado brindó detalles sobre cómo fluctúa la trama de “retornos”: “En el caso de Colapinto, el padre se debe estar gastando un palo verde por año en el nene. Para llegar lo más cerca de la F1 tiene que buscar a quien le ayude a ponerla y el salvoconducto es el Estado, a través de YPF. Pero todo el sponsoreo estatal tiene un retorno que se maneja desde afuera”, consigna el medio Tribuna de Periodista.

En ese sentido, el informante añadió: “En el caso de Canapino es diferente, porque Martinez Sosa lo mantiene desde chiquito. En su caso, el negocio empezó con un argentino que tiene un equipo Indy en USA. Los Legnani lo contactaron con (Gerardo) Zamora para que traiga esa carrera a la Argentina, y para traer esa carrera tenía que haber un piloto argentino y surgió lo de Canapino”.

Las palabras del hombre fueron confirmadas por otras fuentes de alta relevancia: “Canapino fue patrocinado toda la vida por la Superintendencia de Seguros de la Nación”.

Cabe destacar que Aníbal Colapinto, padre del piloto de Fórmula 3, supo ser el dueño de Federal Seguros, firma que fue vaciada y le dejó toda la deuda a la Superintendencia de Seguros de la Nación.