El gobierno trasandino había movilizado aeronaves de combate y activado el protocolo de alerta ante una supuesta violación de la frontera. Cancillería aseguró que no hubo advertencia diplomática, ni militar chilena.

El gobierno de Javier Milei salió rápidamente a desmentir que un avión argentino haya invadido el espacio aéreo de Chile, como alertaron las autoridades del país vecino en las últimas horas, justificando un amplio despliegue de su fuerza aérea.

Según habían señalado desde el país transandino se activó una alerta de tráfico no identificado a las 20 horas en la zona oriental del Estrecho de Magallanes, por un Avon militar que sobrevolaba el espacio aéreo vecino.

Sin embargo, desde Casa Rosada negaron que ese dato sea real y destacaron que no hubo contacto por parte del canciller de Chile, Alberto van Klaveren, ni de autoridades militares tal y como lo señala el procedimiento en este tipo de casos.

“No hubo ningún avión de la fuerza aérea argentina ni de línea que haya viajado por la zona en ese horario. No recibimos tampoco notificación de la base chilena ni hubo una comunicación diplomática después”, indicaron desde el Ejecutivo nacional al medio TN.

A pesar de la negativa de la gestión libertaria, la ministra de Defensa de Chile, Maya Fernández, aseguró esta mañana que “existió una alerta de tráfico aéreo no identificado, ante lo cual nuestra Fuerza Aérea de Chile activó los protocolos, despegando los aviones F-5 en resguardo” y ratificó que se inició una investigación al respecto.

Por su parte, desde el Ministerio de Defensa, que comanda Luis Petri, exlpicaron que “la única actividad de vuelo que se ejecutó el día 27 de agosto fue un vuelo LADE con el sistema Twin Otter”, y que comenzó sus recorridos a las 12 y terminó a las 17 horas de esa misma jornada. Asimismo, sostienen que la Fuerza Aérea de Chile (FACh) desplegó los aviones de combate F-5 desde la base de Chabunco de Punta Arena sin comunicarse con la base argentina más cercana.