Desde hace años, la falta de divisas es uno de los principales obstáculos al crecimiento de la economía argentina. Qué sucedió durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, Mauricio Macri, Alberto Fernández y Javier Milei.

La escasez de dólares ha sido históricamente uno de los mayores obstáculos para el crecimiento económico en Argentina. Por este motivo, y especialmente en los últimos años, los especialistas han monitoreado de cerca la evolución de las reservas del Banco Central (BCRA), que se han convertido en un indicador clave.

Las reservas que posee la autoridad monetaria son fondos en dólares u otras divisas que el país utiliza para cubrir importaciones, compromisos de deuda y la demanda de gastos turísticos en el exterior, entre otras necesidades. Estos activos provienen de exportaciones, créditos de organismos privados y depósitos de ahorristas.

En términos generales, las reservas se dividen en brutas y netas. Las reservas brutas incluyen divisas provenientes de exportaciones y otros ingresos en moneda extranjera, oro, préstamos internacionales, el swap con China y los encajes de los depósitos de ahorristas.

Según los últimos datos del Banco Central, al 31 de julio las reservas brutas sumaban US$26.402 millones. De este total, aproximadamente un 55% corresponde a divisas, un 17% a oro, un 27% a colocaciones realizables en divisas (incluyendo inversiones realizadas por el BCRA), y el resto a convenios multilaterales de crédito.

Por otro lado, las reservas netas son aquellas consideradas “de libre disponibilidad”, es decir, que no incluyen todos los pasivos, créditos o encajes. Los economistas y el FMI prestan especial atención a este indicador, ya que se considera el verdadero «poder de fuego» de la autoridad monetaria.

Estimaciones privadas indican que las reservas netas cerraron julio con un saldo negativo cercano a los US$6.500 millones, tras una intervención del equipo económico en el mercado de dólares financieros.

Evolución de las reservas durante los últimos gobiernos

Desde la crisis de 2001, las reservas han sido un tema recurrente en la opinión pública. Durante el gobierno de Néstor Kirchner, cuando el país gozaba de superávit gemelos, las reservas del BCRA crecieron significativamente. Entre mayo de 2003 y diciembre de 2007, las reservas pasaron de US$11.048 millones a US$46.443 millones, un aumento de US$35.395 millones. Este incremento permitió al entonces presidente cancelar la totalidad de la deuda de Argentina con el FMI en enero de 2006, con un solo pago de US$9.530 millones.

Los mandatos de Cristina Kirchner mostraron dinámicas diferentes. Durante su primer mandato (2007-2011), las reservas no experimentaron grandes variaciones, manteniéndose alrededor de los US$45.566 millones. Sin embargo, en su segundo mandato, la tensión en el frente externo se incrementó notablemente, y se implementaron las primeras restricciones cambiarias. A pesar de estas medidas, las reservas del BCRA disminuyeron en US$21.581 millones entre 2011 y 2015, finalizando su gestión con US$24.862 millones.

La llegada de Mauricio Macri a la presidencia en 2015 trajo la promesa de levantar el cepo cambiario. Para lograrlo, su equipo económico obtuvo financiamiento externo, lo que permitió engrosar las reservas. Durante la primera mitad de su mandato, las reservas superaron los US$63.000 millones en enero de 2018. Sin embargo, la situación financiera se deterioró rápidamente, y el gobierno recurrió nuevamente a un préstamo del FMI. A pesar de ello, no se logró evitar la reimposición del cepo cambiario, y Macri finalizó su gestión en diciembre de 2019 con US$43.785 millones en reservas.

La gestión de Alberto Fernández ajustó en varias ocasiones las normativas cambiarias, pero no logró frenar la salida de divisas. A medida que la demanda de importaciones crecía, las restricciones se multiplicaron. Las reservas brutas cayeron a US$21.017 millones, y las netas fueron negativas por unos US$10.000 millones al final de su mandato.

Desde la asunción de Javier Milei hasta el 31 de julio, las reservas crecieron US$5.382 millones, incluyendo pagos al FMI y a bonistas. La administración libertaria adoptó una política de fuerte devaluación en la primera semana de su mandato y una apertura gradual de la demanda importadora, aunque todavía persisten varias restricciones cambiarias y el impuesto PAIS.

Evolución mensual de las reservas durante el gobierno de Milei

En los primeros siete meses y medio de la gestión de Javier Milei, se observan dos etapas claras: un período de ingreso de dólares entre diciembre y mayo, y un último bimestre más desafiante, con salida de divisas.

• Diciembre 2023: Las reservas del BCRA aumentaron US$1.864 millones, con compras de US$2.896 millones en el mercado.
• Enero 2024: Las reservas sumaron US$4.568 millones, con US$3.272 millones provenientes de compras en el mercado de cambios y US$2.579 millones de desembolsos de organismos internacionales.
• Febrero 2024: Las reservas cayeron US$951 millones, a pesar de las compras de US$2.358 millones del BCRA, debido a pagos de deuda por US$974 millones.
• Marzo 2024: Las reservas crecieron US$437 millones, aunque el BCRA compró US$2.882 millones, los pagos de deuda redujeron la acumulación.
• Abril 2024: El BCRA adquirió US$3.345 millones, pero las reservas solo aumentaron US$451 millones, debido a pagos de deuda de más de US$2.800 millones.
• Mayo 2024: Fue el último mes de compras netas, con US$2.532 millones adquiridos y US$1.085 millones sumados a las reservas.
• Junio 2024: El BCRA tuvo un saldo negativo de US$47 millones en el mercado, pero las reservas crecieron US$358 millones gracias a desembolsos internacionales.
• Julio 2024: Las reservas retrocedieron US$2.623 millones debido a la salida de divisas por ventas del BCRA en el mercado, pagos de importación de energía, bonistas, al FMI y amortización de capital.

Polémica por el oro del Banco Central

Recientemente, el ministro Luis Caputo confirmó que el BCRA había enviado parte de su oro al exterior para generar rendimiento. Sin embargo, ni el funcionario ni la autoridad monetaria brindaron detalles sobre el monto, destino, tipo de operación o interés percibido.

El titular de La Bancaria y diputado por el Frente de Todos, Sergio Palazzo, solicitó acceso a la información pública para conocer estos detalles, apuntando a dos fechas específicas en junio para la salida del oro. Se especula que el metal fue enviado a algún tesoro en Londres, aunque el BCRA no ha dado respuesta.

Caputo elogió al BCRA por buscar un rendimiento adicional sobre el oro. No obstante, la tasa de interés por oro físico es variable y suele estar en torno o por debajo del 2% anual. Además de generar renta, la operación podría haberse realizado para ganar una diferencia en dólares o utilizar los lingotes como garantía en un préstamo internacional, aunque Caputo negó esta última posibilidad.