Inflación de julio: una familia tipo necesitó casi 230 mil pesos para no ser pobre en Ciudad de Buenos Aires

La escalada inflacionaria que atraviesa el país deteriora cada día el poder adquisitivo de los argentinos. Según el estudio realizado por el Centro de Educación, Servicios y Asesoramiento al Consumidor (CESyAC), una familia tipo de clase media necesitó 229.859, 24 pesos para cubrir sus gastos durante julio.

Este dato representa un alza de 3,2% respecto al mes anterior, y en el acumulando de los últimos 12 meses alcanza una suba del 55%. La medición se realiza sobre una canasta compuesta por bienes y servicios, que cubren la alimentación, vivienda, medicina, educación privada y actividad recreativa, de un matrimonio y sus dos hijos.

En el caso de los productos de consumo masivo, se llevaron un 28 por ciento de ese monto total, es decir unos 64.526,16 pesos, mientras que para cubrir los servicios básicos del hogar, se utilizó el 72%, unos 165.333,08 pesos, incluyendo el alquiler.

Por su parte los productos de más consumo, como alimentos, higiene y limpieza, tuvieron un incremento de 5,4%, en el séptimo mes del año. Mientras que en servicios el alza fue de 2,4%, en el mismo periodo.

De este modo, la evaluación de la canasta de clase media porteña contrasta con el avance del Índice de Precios al Consumidor (IPC) que elabora el INDEC que mostró un alza de precios de 7,4%.

Por otro lado, los datos generales de la primera quincena de agosto, ya marcan un piso del 6% para la inflación. Teniendo en cuenta que los alimentos vienen subiendo desde fines de julio.

Es que el dato de agosto está impactado por el aumento de 40% en colectivos y trenes en el AMBA, a lo que se le suma la ronda de actualizaciones de precios previstas en prepagas y expensas. Todo esto, sumado a una inercia que parece difícil de disipar en el corto plazo y un mayor deslizamiento cambiario.