El ex Techint, estará a cargo de “recomponer” la petrolera estatal con miras a una posible privatización de acuerdo con los planes del nuevo Gobierno que se presenta.
Tras la victoria del libertario Javier Milei, comienza a delinearse el gabinete del nuevo Gobierno, entre los elegidos se encuentra Horacio Marín, quien ocupará la presidencia y dirección de YPF, unificando ambas funciones, que en la gestión actual estaban a cargo de dos personas distintas.
Se trata de un técnico con mucha experiencia en la industria petrolera que hizo su carrera en Grupo Techint, y que según indicó el nuevo Presidente será el encargado de “recomponer” la empresa, con miras a una posible privatización.
De hecho, el propio Milei señaló en sus primeras declaraciones tras la victoria sobre Sergio Massa, en el balotaje del pasado domingo, que una vez equilibradas las cuentas de la petrolera estatal, se podrá avanzar en una privatización del 51% de las acciones.
“En línea con nuestra convicción de impulsar una YPF íntegramente profesional, se recomendará al directorio la designación del ingeniero Horacio Marín como presidente y CEO de la empresa”, señalaron desde el entorno del referente de La Libertad Avanzan (LLA), respecto a la elección de Marín.
El elegido para comandar la empresa estatal, cuenta con gran experiencia, graduado de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), con estudios de posgrado en la Universidad de Texas y Stanford, ha transitado la mayor parte de su carrera en la firma petrolera Tecpetrol, dependiente del grupo Techint. Allí ingresó en 1988 y cuenta con gestión de proyectos importantes como Fortín de Piedra, el mayor yacimiento de shale gas del país, en Vaca Muerta.
Al conocerse la noticia de la designación de Marín al frente de la compañía en el fututo Gobierno, la reacción de los mercados internacionales ha sido más que positiva. Sin embargo se encontrará con varios desafíos, en primer lugar estabilizar el precio de los combustibles en el mercado interno, en paridad con los valores de importación, que según indican desde YPF se encuentran en un 20% por debajo.
Por otro lado, queda pendiente el pago del juicio que la Argentina perdió contra Buford Capital, y que obliga al país a pagar unos 16 mil millones de dólares, por los errores en la estatización de la petrolera en 2012, en manos de la entonces presidenta Cristina Kirchner y el ex ministro de Economía, Axel Kicillof.
Además, deberá responder a los deseos del nuevo mandatario que habia indicado que: “YPF y Enarsa tendrán un rol en la transición energética, mientras que se racionalizan esas estructuras, se las ponen a crear valor y de esa manera se puedan vender de una manera muy beneficiosa para los argentinos”, horas después de su triunfo.
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