Tras el cierre de alianzas, Scioli delinea una estrategia defensiva para contener los ataques del kirchnerismo

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Cerca del precandidato a presidente dicen que el plan es mostrar al embajador como un postulante “moderado”. Cuál será el rol de Aníbal Fernández y Victoria Tolosa Paz.

Tras meses de especulaciones, en las últimas horas se confirmó lo que muchos en el oficialismo querían evitar: el candidato presidencial de Unión por la Patria (ex Frente de Todos) se definirá en una PASO de la que participarán al menos dos fórmulas: la que tendrá la “bendición” de Cristina Kirchner y la que encabece Daniel Scioli.

Cerca del embajador en Brasil interpretan como una “victoria“ que el kirchnerismo haya cedido en el piso de votos de cada lista, cuestión que terminó abriendo la puerta a Daniel Scioli para poder competir en una interna. En la última semana la presión de Máximo Kirchner para que el exgobernador baje su candidatura se incrementó, pero el sciolismo resistió y torció la pretensión de fijar la base para integrar las listas en el 40% de los votos de la coalición.

Más allá de las fuertes críticas que Máximo Kirchner dejó trascender con el comunicado del PJ bonaerense -menciona “abundancia de vanidades” y vincula al exmotonauta con la Justicia “macrista” que “proscribió a CFK” por advertir sobre una eventual judicialización del conflicto sobre las listas-, Scioli parece decidido a evitar la confrontación.

No vas a verlo contestar a nadie ni a nada que salga de La Cámpora o el kirchnerismo duro. Su estrategia es mostrarse como el candidato moderado”, adelantan a TN desde el sciolismo. De esta manera, el exgobernador bonaerense se prepara para encarar un tramo de actividades en el que se mostrará con cada vez más frecuencia junto con Victoria Tolosa Paz, su precandidata a gobernadora e incrementará sus actividades en el conurbano.

Daniel Scioli y Victoria Tolosa Paz, su candidata para la gobernación bonaerense. (Foto: Twitter/Vtolosapaz)
Daniel Scioli y Victoria Tolosa Paz, su candidata para la gobernación bonaerense. (Foto: Twitter/Vtolosapaz)

Scioli “celebró” que el kirchnerismo ceda con las PASO y evitará responder a las críticas K de la campaña

Este jueves, Scioli aseguró que su participación en las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias “no se trata de un problema de cartel”, como dijo Máximo, sino de “responsabilidad y compromiso con el país”.

“Yo no soy títere de nadie ni candidato de nadie. Soy candidato de Daniel Scioli, punto, ¿está claro? Y quiero legitimarme y tener el poder político, independencia, autonomía, para el tiempo que se viene en Argentina a partir del resultado de las PASO. Aspiro a ser presidente para poner a la Argentina en la agenda del desarrollo”, afirmó el exgobernador bonaerense en diálogo con Futurock.

Lo importante es que se logró el objetivo: va a haber PASO. Yo quería lograr el objetivo de integrar y ampliar la participación en nuestro frente y eso se logró. El objetivo se logró porque va a haber PASO, algo que pidió también “el jefe de Gabinete- Agustín Rossi, -el presidente y titular del PJ- Alberto Fernández y “el dirigente social- Juan Grabois”, enfatizó Scioli.

Máximo Kirchner intentó bajar a Scioli de la pelea presidencial. (Foto: NA).
Máximo Kirchner intentó bajar a Scioli de la pelea presidencial. (Foto: NA).

Más al choque fue Aníbal Fernández, ministro de Seguridad, apoderado electoral y vocero informal de Scioli, quien aseguró que el comunicado del PJ bonaerense “está escrito con bronca porque nosotros sostuvimos lo que hay que hacer”. “Lo del carguito es absolutamente peyorativo porque estamos discutiendo diputados nacionales”, expresó ante la prensa.

La Cámpora y el Frente Renovador venían ejerciendo presión desde hace días para que el embajador en Brasil diera de baja su precandidatura, en medio del debate para tratar de confluir en una candidatura “de síntesis”.

La última jugada K apuntaba a subir (del 25 al 40%) el piso para las alianzas luego de las PASO, lo que hubiera dejado a Scioli fuera de competencia. Fue por ello que Aníbal Fernández amenazó con judicializar el tema; y a La Cámpora no le quedó otra que aceptar la interna.