Diversos estudios han comprobado que los pacientes que tengan un mayor índice de masa corporal son propensos a enfermarse y morir a causa de Covid-19 y la evidencia científica también prueba que las vacunas pierden efectividad en estos casos.
El doctor Matthew B. Laurens, investigador principal de la Escuela de Medicina de la Universidad de Maryland, admitió sobre los ensayos de la vacuna de Moderna Therapeutics: “Sabemos de otras vacunas que han sido probadas en poblaciones de personas con obesidad que estos individuos no responden tan bien a estas vacunas”.
“Mientras estamos desarrollando una vacuna para la Covid-19, reconocemos que podría no funcionar en todas las poblaciones, incluyendo a aquellas que sufren obesidad. Por lo tanto, esa es una gran preocupación”, explicó el especialista.