Mota extraída de TN por Bruno Yacono
En el comando de campaña oficialista reconocen dificultades para instalar en la agenda temas que comprometan al libertario y ven una oportunidad en las discusiones que se darán en octubre. Buscan frenar su crecimiento en las encuestas.
En el Gobierno reconocen que tras las PASO los números de Javier Milei parecen haberse engrosado. “Se generó una bola que no para de crecer”, grafica un dirigente de Unión por la Patria (UxP). El fenómeno, explican en la sede de campaña de calle Mitre, se da porque hasta el momento nadie logró demostrar en la escena pública que sus ideas son difíciles de implementar.
Es en este contexto que en el Gobierno analizan diferentes estrategias para ponerle un freno al alza del economista de La Libertad Avanza y piensan en los debates presidenciales de octubre como una “oportunidad” para “ponerlo contra las cuerdas” y exponer lo “impracticable” de sus propuestas.
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Según el análisis del comando de campaña de UxP, el crecimiento de la figura de Milei se debe en parte a que el libertario logró imponer su agenda sin que el electorado profundice en las consecuencias de esas medidas.
Massa plantea que el debate presidencial será una chance para confrontar con Milei: cuál será su estrategia
“Nadie lo cuestiona. Y cuando lo cuestionan, se enoja y lleva la discusión a otro foco. Comparó la NASA con el Conicet cuando en todo caso debió hacerlo con la CONAE y nadie dijo nada”, se quejan en el Gobierno.
En ese sentido, en el entorno de Massa intentarán a lo largo de las próximas semanas imponer en la campaña “una discusión fuerte de ideas” y “contrarrestar la locura de Milei con un planteo de racionalidad” representado por el titular del Palacio de Hacienda.
Hasta ahora, explican en el Gobierno, “Milei no confrontó con nadie” y por eso ven en los debates presidenciales que se realizarán en octubre -fijados por ley- una oportunidad para “exponerlo”.
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La idea es que, a su regreso de Estados Unidos, adonde viajó para reunirse con el FMI, Massa se dedique a instalar una discusión sobre las ideas de Milei, entre ellas la dolarización, la educación y la salud pública y lo que en el oficialismo llaman una creciente violencia en caso de que se imponga el libertario.
En los debates, Massa tendrá dos oportunidades concretas de polarizar con las propuestas del libertario. Corre riesgos, claro, porque es el ministro de Economía de un país con alta inflación, nulas reservas e inestabilidad cambiaria, pero se trata en definitiva de una chance para dar el debate ante el electorado e intentar sumar votos de cara a su objetivo de meterse en el balotaje.
Aunque intentará instalar el debate en campaña, las discusiones-a realizarse a días de la elección- representan una chance clave para demostrar que las ideas de Milei no son tan simples y que podrían tener consecuencias sociales, políticas y económicas.
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Aunque en UxP hay dirigentes que repiten que no se debe subestimar a Patricia Bullrich, para Sergio Massa las posibilidades de que la postulante de JxC llegue al balotaje son remotas. El tigrense dice que individualmente la exministra de Seguridad tiene 4 millones de votos de diferencia con Javier Milei y unos 2 millones con el oficialismo, por lo que entiende que, de haber un mano a mano en noviembre, será entre peronistas y libertarios.
En el oficialismo buscarán sumar al menos un 30% o 40% de los 2,6 millones de votos de Horacio Rodríguez Larreta; retener los casi 1,4 millones de electores de Juan Grabois; sumar al menos unos 200 mil votantes de Juan Schiaretti; inyectarle a UxP los 183.000 votos de Guillermo Moreno; los casi 90 mil de Santiago Cúneo y que el trabajo de los intendentes, gobernadores y organizaciones sociales dé resultado para llevar a las urnas a buena parte de los 13 millones de argentinos habilitados para votar y que por diferentes motivos no lo hicieron. “En ese escenario, es difícil que se nos escape el balotaje”, graficaba un dirigente cercano a Massa con un -tal vez- desmedido optimismo.