La Policía intentó que los beneficiarios respetaran las distancias mínimas para evitar el contagio del COVID-19, pero nadie lo hizo.

«Tanto guardarnos para nada», es la frase que reflejó la indignación de salteñas y salteños al ver la aglomeración de gente que se registró este viernes en el centro de la capital provincial. Cientos de beneficiarios de jubilaciones, pensiones y Asignación Universal por Hijo se agolparon en las sucursales bancarias para cobrar. 

Por decisión del Banco Central, hoy reabrieron los bancos para pagar jubilaciones, pensiones y planes sociales a quienes no tienen tarjeta de débito. Fueron a retirar efectivo incluso quienes no debían hacerlo. 

En muchos casos se creyó que hoy se liquidaba el pago de los beneficios del mes de abril, pero no.

El Comité de Emergencia dispuso que policías y bomberos realicen un operativo especial en las inmediaciones de la city para que se cumpla con la distancia recomendada en el marco de la pandemia del coronavirus, pero fueron desbordados por la cantidad de personas.

El Gobierno también dispuso una carpa de atención médica de emergencia a cargo del Samec y la distribución de sillas para evitar eventualidades durante la primera jornada de atención bancaria.

En las primeras horas de atención, hubo escenas desesperadas de personas que no estaban alcanzadas por las disposiciones del Banco Central de la República Argentina para ser atendidas en el marco de la reaprtura hoy y hasta forcejeos con personal de seguridad de las entidades.

Pese a que se anunció insistentemente que la atención era para jubilados, pensiones y planes sociales, hubo cientos de comentarios de aquellos que reconocieron que fueron al banco para ver si podían conseguir un crédito, buscar la tarjeta de débito y realizar consultas, ya que por teléfono no pudieron conseguir atención, informó FM Aries.