El Ingreso Familiar de Emergencia fue la principal medida del Gobierno Nacional para reducir el impacto económico de la pandemia y de la cuarentena en los sectores más vulnerables de la sociedad. Hasta el momento fueron otorgados tres subsidios de 10 mil pesos destinados a un universo de aproximadamente nueve millones de personas en casi siete meses de aislamiento social. Frente al aumento de la pobreza y en medio de un contexto de crisis económica agravada, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, se refirió a la posibilidad de un cuarto pago del bono de ANSES.
Cada desembolso del Ingreso Familiar de Emergencia le cuesta al Gobierno alrededor de $89.000 millones, el equivalente a tres meses de lo que gasta en el programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) -la otra medida que lanzó el Poder Ejecutivo para paliar las consecuencias económicas en el actual contexto-. Por ello, hasta el momento priman las dudas con respecto al pago de un nuevo IFE. Según trascendió días atrás, una de las posibilidades en análisis es que la ayuda de 10 mil pesos involucre solo a jóvenes de 18 a 24 años.
Consultado sobre la posibilidad de que el Estado otorgue un cuarto Ingreso Familiar de Emergencia, Daniel Arroyo declaró: “No está definido aún”. “Se pagaron tres IFE, son nueve millones de personas, no está definido aún pero sí está claro el compromiso del Presidente de acompañar a los que menos tienen”, sostuvo en una entrevista a TN.
Sobre la crisis económica que atraviesa el país, Arroyo aseguró que debió ejecutar el 140% del presupuesto anual del Ministerio de Desarrollo Social. A su vez, reconoció que el pago del IFE demostró el alto nivel de informalidad laboral que tiene el país al argumentar que de 16 millones de familias el subsidio lo cobran 9 millones.