Se agrava la crisis de Garbarino: deudas impagas, despidos y un futuro incierto

0
293
Caído el ingreso de un nuevo socio, la compañía trabaja contrarreloj para buscar un nuevo comprado que permita mantener a la casa de electrodomésticos en pie La situación critica que atraviesa Garbarino parecía comenzar a resolverse con el interés del empresario Facundo Prado de comprar una de las principales casas de electrodomésticos del país. Sin embargo, las negociaciones no llegaron a buen puerto y el dueño de Supercanal retiró su oferta hundiendo aún más a la compañía que no le encuentra salida a la crisis que atraviesa.

En la firma que hoy controla el empresario de los seguros, Carlos Rosales, reconocen que el panorama es más que preocupante. La empresa adeuda parte de los salarios de abril y mayo a sus más de 4000 empleados y tuvo que disponer el cierre de decenas de sucursales.

Para peor, recibió una respuesta negativa del Gobierno porteño sobre el reclamo de devolución de $438 millones de “multas indebidas” con los que podría pagar los sueldos atrasados de sus empleados. Como consecuencia, los trabajadores siguen sin cobrar y como respuesta tienen plantas de la compañía tomadas: se trata de una filial de Garbarino, Digital Fueguina, en Río Grande, Tierra del Fuego,

A pesar de la reestructuración que logró Rosales con los bancos acreedores que financiaron unos $4.000 millones, según fuentes del sector la deuda total de la empresa, con proveedores y otros, ascendería a unos $15.000 millones.

Caída la compra de Prado, se diluyó la ilusión de tener en el corto plazo una inyección de dinero que les permita solucionar las deudas mas apremiantes en el corto plazo y alejar los fantasmas de un concurso de acreedores. Sin embargo, el deseo quedó trunco aunque desde la compañía sostienen que están en negociaciones con otros dos interesados, aunque prefieren no dar a conocer sus nombres.

De acuerdo a fuentes del mercado, el déficit operativo de la firma supera los $300 millones mensuales y, debido a las multimillonarias deudas que arrastra con sus proveedores, las principales marcas de electrónica y electrodomésticos le están retaceando el envío de mercadería, lo que termina acentuando los problemas de la empresa. “En mayo las ventas cayeron un 60% y en junio la baja se profundizó al 75%”, reconocen en Garbarino a La Nación.

Los números son aún mas dolorosos si se contrasta con la reactivación que vive el sector: hoy las ventas están en promedio un 10% arriba en unidades frente a 2020. Aunque reconocen que los últimos tres años fueron malos para todas las compañías: “el panorama es muy complicado. Algunas empresas como Frávega, Cetrogar o Naldo Lombardi están sobrellevando un poco mejor la crisis, aunque el gran ganador es Mercado Libre”, explicó un hombre del sector al mismo medio.