Una diputada nacional de JxC se quedaba con parte del sueldo de sus empleados y debió pedir licencia
Con respecto a las donaciones, reveló que ayudaba económicamente a gente de manera informal. Pero el capitán se hunde con el barco: “Yo sé que otros diputados, los tipos se las quedan, no hacen las donaciones que yo hago, ni contratan en negro como yo contrato“. Frente a semejante acusación de corrupción, el arco político de Corrientes estalló en rabia y sectores de la oposición analizan elevar una denuncia ante la Justicia.
Ante la trascendencia del caso, la legisladora argumentó en su defensa que había sido víctima de una operación de prensa maliciosa. Dijo que la habían editado y que a la luz de los hechos había decidido tomarse una licencia. Entretanto, afirmó que se iba a someter a una investigación judicial para aclarar lo sucedido.
“Quiero aclarar que de ninguna manera mi intención, en aquella conversación con mi equipo de asesores, fue solicitar dinero de sus salarios para mi persona. La intención, que quedó clara en la larga conversación que fue malintencionadamente editada, fue pedir que colaboren con otras personas, como ayudo yo con parte de mi dieta a personas con situación social vulnerable”, agregó.
“Confío en que la Justicia podrá deslindarme de las acusaciones que por estas horas los medios de comunicación están formulando sobre mi persona. El pedido de licencia tiene como objetivo no comprometer al bloque de diputados de la UCR y a mis pares de las otras fuerzas políticas. Soy una persona honesta, que puede demostrar perfectamente su patrimonio. Esto se puede observar en mis declaraciones juradas, que dejan constancia fehaciente de que mi patrimonio no ha variado desde que ingresé a la función pública. Tengo además una fuerte fe y el compromiso con los más necesitados siempre ha sido para mí un eje rector en mi vida”, finalizó.
Sobre las filtraciones, se conspiró que fueron producto de una maniobra política para desvincular a Regidor de su banca, aunque la versión más verosímil resulta de un malestar generalizado entre sus empleados.
Las declaraciones de los audios, sin embargo, son elocuentes: “El que no está de acuerdo me dice, porque hoy es 25 y podemos rescindir perfectamente el contrato. Van a cobrar 40.000 pesos cada uno. El resto es reintegro”, sentenció Regidor. “Vos tenés que tener un sobre de cada uno, entonces cuando ellos te dan, hacés el recuento, ponés el nombre y cerrás el sobre, y yo te voy a decir cada mes a quién le vas a entregar. Vos te encargás de ellos, yo me encargo de lo que es mío. Lo mío es mío”.
